Desde hace años preparamos esta receta de masa de pizza casera. Sabemos que son muchas las recetas que circulan por libros e internet, y que cada una tiene sus peculiaridades. Tras muchas recetas probadas, la que aquí os presentamos hoy es una variación personal, que parte de la receta original del gran maestro
Peter Reinhart publicada en su libro American Pie: My Search for the Perfect Pizza. 

En el post de hoy, no solo os daremos la receta para preparar la masa, sino que también os daremos los consejos de cocinado para obtener una pizza crujiente en nuestro horno de casa.

Ingredientes (2 pizzas)

• 100 gr Harina Fuerza
• 100 gr Harina Integral
• 100 gr Harina Normal
• 175 ml agua templada
• 7 gr levadura seca
• 10 ml aceite oliva virgen extra
• 7 gr sal
• 10 gr de Cardamomo molido (opcional) 

Procedimiento

Para obtener esta masa es muy sencillo, mezclaremos todos los ingredientes y los amasaremos hasta obtener una masa uniforme.

La dejaremos reposar durante, al menos, 1 hora, donde duplicará su tamaño.

Una vez ha reposado dividimos la masa en dos porciones. Estiramos cada porción formando la base de la pizza. Podemos estirarla hasta los 30 cm de diámetro. A nosotros nos gusta darle un segundo reposo una vez estirada, para que crezca un poco. En este caso, un reposo de 30 min será suficiente.

Es momento de añadir la salsa de tomate. Nosotros usamos tomate triturado natural, que hemos colado previamente para reducir su cantidad de agua y que así se quede como una pasta de tomate. A esta pasta de tomate añadimos albahaca y orégano secos.

Una vez distribuido el tomate sobre la masa, volvemos a espolvorear con un poco de orégano y albahaca.

Ahora es momento de añadir nuestros ingredientes, por ejemplo podemos hacerla de pollo, con cebolla morada, pimiento verde y un poquito de salsa barbacoa.

Lo más importante del proceso y de los ingredientes es usar ingredientes con poca agua para que nuestra masa salga crujiente.

Pre-calentamos el horno a todo lo que da, en nuestro caso a 270ºC, pero si el tuyo da más grados, puedes ponerlo a más grados. Pondremos nuestra pizza sobre una fina base metálica, alguna base para pizzas, cuya función será la de transmitir el calor muy rápidamente a la base de la pizza. 

Pondremos el horno con calor solo abajo. Lo que buscamos es provocar un cambio muy brusco de temperatura en la base de la pizza, de modo que se cocina muy rápidamente con calor inferior, dejando una base crujiente mientras que crece unos pocos milímetros con una pequeña miga en su interior.

Con estos consejos la pizza estará lista tras 6 minutos en el horno.

A disfrutar y si quieres saber más sobre la pizza consulta nuestras otras recetas:

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