Raviolis caseros de espinacas y ricotta

En la receta de hoy os presentamos un jugoso y sabroso plato de pasta: Raviolis caseros de espinacas y ricotta. Un mezcla exquisita.

Ingredientes (2 personas)

Para la masa de pasta

  • 200 gr de harina (a ser posible doble 0, con poco gluten)
  • 2 huevo (a ser posible de corral, por el sabor y color amarillo que tienen)
  • 1 pizca de sal
  • 25 gr de espinacas

Para el relleno

  • 25 gr de mantequilla
  • 150 gr de espinacas
  • 150 gr de queso ricotta
  • 25 gr de queso parmesano
  • nuez moscada
  • sal y pimienta

Procedimiento

Comenzaremos haciendo la pasta fresca tal y como explicamos en el post de Pasta Fresca al huevo casera. La única diferencia es que añadiremos a la pasta el juego de las espinacas para que la pasta adquiera un color verdoso. Nosotros extrajimos el jugo con una licuadora.

No añadir demasiado jugo o nuestra masa de pasta quedará demasiado líquida y tendremos que corregir añadiendo harina.

Mientras la masa reposa nos pondremos con el relleno.

Picaremos todas las espinacas y ponemos la mantequilla a derretir en una sarten. Cocinamos las espinacas en la mantequilla durante 5-10 min a fuego medio. Salpimentamos. Veremos como se reduce su tamaño y expulsan el agua que contienen, aumentamos el fuego para que el agua se evapore.

Ponemos el queso ricotta en un bol y le añadimos una cucharadita de agua. Mezclamos todo hasta obtener una pasta densa. Añadimos el queso parmesano. Vertemos la mezcla de quesos sobre las espinacas y cocinamos unos minutos hasta que todo se integre.

Añadimos la nuez moscada, sal y pimienta. Apagamos el fuego y reservamos.

Debe quedar un relleno jugoso pero espeso. Si queda demasiado líquido añadir algo más de queso parmesano.

Laminamos la pasta en la laminadora hasta obtener unas láminas finas pero consistentes. En nuestra máquina es la posición 8 de 9.

Una vez tenemos las láminas las extendemos sobre la encimera y colocamos cucharadas de nuestro relleno a lo largo de la lámina, dejando entre bolita y bolita unos 5 cms.

Pintamos con el dedo mojado en agua el contorno de la bolita y ponemos otra lámina de pasta encima. Suavemente y con delicadeza apretamos con los dedos el contorno de la bolita para encerrarla entre la lámina superior e inferior. Y procedemos a cortar cada uno de los raviolis.

Podemos enharinar un plato para dejar ahí todos los raviolis ya hechos mientras continuamos con el resto.

Para cocinarlos los haremos unos 3 minutos en agua casi hirviendo. Como el contenido ya está cocinado y la pasta es casera y muy fina, solo necesitamos un par de minutos para que todo esté cocinado.

Los sacamos, escurrimos su agua y los servimos directamente. Pueden acompañarse con pesto.