Hoy comemos tiburón: brochetas de cazón en adobo

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El otro día cuando fui a comprar Cazón al supermercado, en el cartelito de la pescadería donde pone el precio, no ponía Cazón, si no, Caella Tintorera. Y tras investigar un poco, resulta que este pescado es de la familia de los tiburones, de ahí su color blanquecino cuando está crudo y que una vez cocinado, a veces, no sepamos diferenciarlo de algunas carnes. Hoy, lo utilizaremos para hacer unas brochetas en adobo.

Ingredientes

  • 1 kg de cazon cortado en trozos
  • 6 dientes de ajo
  • 1 cucharada de comino molido
  • 1 cucharada pimentón dulce
  • 1 cucharada de orégano
  • 2 hojas de laurel
  • 100 ml de vinagre blanco
  • 100 ml de agua
  • sal
  • harina para rebozados
  • aceite de oliva

Procedimiento

Antes de nada realizaremos el adobo. Para ello necesitamos de un mortero, donde añadiremos los ajos pelados, un puñado de sal y empezaremos a majarlo. Una vez majada esta primera mezcla añadimos los cominos, el pimentón dulce y el orégano y volvemos a majar el conjunto. Una vez esté todo bien mezclado, añadimos el vinagre y removemos para que quede una mezcla homogénea. Y por ultimo añadimos el agua y volvemos a remover.
En un recipiente adecuado, colocamos todo el cazón cortado en trozos como de pincho moruno, y lo cubrimos con la mezcla del adobo que acabamos de realizar. Es muy importante que quede todo el cazón bien cubierto, por lo que si es necesario, añadir más agua y vinagre. Una vez cubierto lo dejamos reposar entre 8 y 48 horas (dependiendo de como de fuerte quieras el sabor) en la nevera cubierto con papel de plata.
Pasado el tiempo de adobado, escurrimos el cazón, pero no lo pasamos por agua para limpiarlo, si no que simplemente le retiramos el líquido en el que ha estado sumergido.

Ahora procederemos con el rebozado. Para ello utilizaremos harina para rebozado. Nosotros recomendamos harina de garbanzo andaluza, la típica para hacer el pescaito frito de andalucía y perfecta para nuestra receta de hoy. Pasamos el cazón, previamente escurrido, por la harina y retiramos la harina excedente dándole unos golpes con las manos.
Cuando tengamos todos los trozos con harina, en una sartén con aceite de oliva muy caliente, los freímos. Es importante tener el aceite a alta temperatura para que el rebozado quede bien crujiente.
Al retirarlos de la sartén, los dejamos reposar en un papel de cocina para que se absorba el aceite excedente. Y finalmente los colocamos en unos palos de pincho moruno.

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